El gobernador de la Florida, Rick Scott, dijo en comunicación escrita que el director del FBI debe renunciar por fallar en tomar medidas en torno al acusado de la masacre en la escuela de Broward.
Su reacción ocurre luego de que el FBI informó este viernes que el 5 de enero una persona cercana a Nikolas Cruz contactó la línea de acceso público del FBI para reportar su preocupación por las armas de Cruz, su deseo de matar gente, comportamiento errático y mensajes preocupantes en sus redes sociales, así como el potencial de que llevara a cabo un tiroteo en una escuela.
Sin embargo, el protocolo del FBI no se siguió y la información nunca fue entregada a la oficina del FBI en Miami y nunca se llevó a cabo una investigación, detalla la comunicación.
El director del FBI, Christopher Wray, dijo que están investigando para saber qué pasó en este caso y revisar el proceso de cómo el FBI responde a la información que reciben del público.
“Hemos hablado con víctimas y familias, y lamentamos profundamente el dolor adicional que esto causa a todos los afectados por esta horrible tragedia”, expresó Wray.
