Nunca es tarde para ser felices.
Ella tiene 80 años y él tiene 95, y este jueves se juraron amor eterno.
Después de enamorarse a primera vista, estuvieron un año de novios y ahora ya son marido y mujer.
Carlos y María se conocieron en un asilo de ancianos.
Ella era solterona y él, viudo hace 14 años.
Fue Carlos quien tomó la iniciativa: le dijo "chica, la edad de nosotros es bien avanzada, no podemos esperar, así que ¿quieres casarte? Ella dijo sí.
Y por lo que cuentan, parecían dos adolescentes, con cosquilleos en el cuerpo y dándose besos y abrazos.
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Aseguran que cuando están juntos, sus corazones laten más rápidamente.
¡Qué sean felices!
