Los recuerdos a un año del desplome del puente de FIU

Amigos y familiares de las víctimas aún claman justicia y lloran la pérdida de sus seres queridos.

La familia de una de las víctimas mortales que dejó el colapso del puente de FIU realizará este viernes una propia vigilia en el sitio del desastre, seguida por una misa de recordación. 

La joven de 18 años Alexa Durán era estudiante de la Universidad Internacional de la Florida, y estaba haciéndole un favor a un amigo, cuando el puente colapso sobre su vehículo y la dejó atrapada, dejando sobreviviente solo a su amigo.

A un año de la tragedia, el padre de Alexa revelo que continúa enviándole mensajes de texto a su hija fallecida, mientras que su madre siempre lleva consigo una prenda de ropa que le pertenecía a ella. Ambos están convencidos de que la muerte de su hija pudo haber sido evitada.

Hace exactamente un año Gina Durán estaba en su negocio cuando contestó una llamada telefónica de su hija, a la 1:40 de la tarde. “Me dijo: mami estoy corriendo, ya voy a llegar tarde al trabajo”, recuerda la madre que Alexa le aviso que estaba llevando a su amigo al doctor.

“Mami te quiero, le dije te quiero también, y esa fue la última ves que hablé con mi niña” rememora entre lágrimas esta madre que a la distancia de lo sucedido continua desconosolada.

La próxima llamada la recibió veinte minutos después, cuando una amiga de Alexa le informó sobre el accidente. Entre el caos inicial, Gina fue al hospital pensando que su hija había sido aerotransportada, pero más de cinco horas después, se materializó su peor pesadilla.

“Pregunto dénde está Alexa? Y me dicen: señora, las únicas personas que sobrevivieron están aquí en el hospital. Y alexa duran no llego aquí”, recuerda la madre que en ese momento pensó lo peor, luego la autopsia indicaría que su hija murió por asfixia.

Los rescatistas tardaron tres días en poder extraer su cuerpo de la camioneta toyota que le había regalado su padre, la cual quedó aplanada por las toneladas de concreto.

El día de la tragedia, Orlando Durán intentó desesperadamente buscar un vuelo de regreso desde Londres, mientras se debatía en que la información que le llegaba del terrible accidente era la que daban los noticieros internacionales.

El padre cree que el accidente fue algo que pudo haber sido prevenido “de muchas maneras, después de haber descubierto que habían fallas con el puente, continuaron con el Proyecto. El hecho de que no cerraron la calle para poder probar el puente fue un crimen. Seis vidas incluyendo la de mi hija se perdieron”.

La familia Durán está entre los 18 litigantes de una demanda en contra de las 25 compañías involucradas en el proyecto. 

La semana pasada los cinco hermanos Munilla que lideran la compañía contratista principal “MCM construction,” se presentaron en corte, declarándose en bancarrota. El propósito es reorganizar su negocio, y evitar que las víctimas reciban más de los 42 millones de dólares que su seguro cubre.  

Los Durán dicen que la única forma en que la comunidad puede superar tragedias como esta, es aprendiendo de los errores. Ellos ahora están planeando una propuesta de ley, que se llamará la ley de Alexa, lo que obligaría al cierre de calles cada vez que sea necesario realizar pruebas o cualquier tipo de trabajo.

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