LOS ANGELES - El presidente encargado del Senado de California, Kevin de León, y organizaciones comunitarias de Los Ángeles advirtieron sobre informes de arrestos de inmigrantes indocumentados en el Sur del estado que han generado angustia y temor entre la comunidad inmigrante.
"Estamos muy preocupados por el bienestar de nuestra gente trabajadora", dijo a Efe de León.
De León indicó que hizo personalmente una llamada al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) en Los Ángeles para saber cuántas personas fueron arrestadas y asegurarse de que tengan acceso a sus abogados.
Según la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA), los agentes de inmigración se presentaron en al menos cinco localidades del área metropolitana de Los Ángeles: Santa Paula, Oxnard, San Bernardino, Van Nuys y Downey.
Las denuncias de estos arrestos, que sumarían alrededor de cien, se hicieron a la línea de ayuda de CHIRLA, cuya directora, Angélica Salas, contó que en menos de tres horas los teléfonos se saturaron con los avisos.
Luego el equipo legal de CHIRLA confirmó algunas de las detenciones.
La preocupación por los arrestos en la comunidad llevó a los activistas a realizar una vigilia frente al Centro de Detención de Inmigración de Los Ángeles, donde son llevados la mayoría de indocumentados arrestados en la ciudad.
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"Sabemos que hay arrestos cotidianos pero esto no es normal y exigimos a las autoridades de inmigración que nos den una respuesta", dijo Salas.
Pese a la situación, de León aconsejó a la comunidad mantener la calma y buscar asesoría legal para hacer respetar sus derechos.
"Yo entiendo completamente que el índice de ansiedad es muy alto pero sus oficiales electos estamos trabajando ahora para conseguir la información necesaria para proteger a nuestra gente", concluyó.
Debido a los arrestos anunciados hoy, CHIRLA convocó para este viernes una conferencia de prensa en donde informará del tema así como estudiar los pasos a tomar.
La información de los arrestos ha propiciado que grupos de personas salieran a última hora a la calle a manifestarse a favor de los inmigrantes delante de las oficinas de ICE en el centro de Los Ángeles.
