Fuego en California comienza a bajar su intensidad

LOS ÁNGELES - Los servicios de emergencia lograron controlar en las últimas horas el 22 % del perímetro del incendio que por tercer día consecutivo permanece activo en un área montañosa del condado californiano de San Bernardino, a 115 kilómetros al noreste de Los Ángeles (EE.UU.).

Los informes ofrecidos por las autoridades señalaron que el fuego, cuyo foco se sitúa en el Puerto de Cajón ha arrasado hasta el momento más de 14.550 hectáreas.

Las llamas forzaron a ordenar la evacuación de 82,600 personas y de 34,500 viviendas.

"El fuego ha mostrado un comportamiento extremo así como rápidas tasas de crecimiento", añadió la nota sobre el incendio conocido como "Blue Cut Fire".

Alrededor de 1.600 miembros de diferentes cuerpos de los servicios de emergencia se encuentran trabajando en las labores de extinción, para las que cuentan con la asistencia de 17 helicópteros.

La situación en las últimas horas en el área afectada permitió levantar el cierre de algunas rutas de transporte que habían sido cortadas por la amenaza de las llamas.

Así, el tráfico volvió a circular en ambos sentidos por la autopista interestatal 15, uno de los ejes viales más importantes de la zona y que conecta el sur de California con Nevada.

En cambio, los alumnos volvieron a quedarse hoy sin acudir a sus clases por el cierre de varias escuelas mientras que el condado de San Bernardino permanece en estado de emergencia.

La violencia del fuego ha impedido que las autoridades puedan ofrecer un balance detallado de los edificios que han sido destruidos por el fuego y ha dificultado las labores de medición del área arrasada.

No obstante, las imágenes de los medios locales han mostrado numerosas construcciones calcinadas así como importantes daños en las estructuras eléctricas.

"Habrá muchas familias que regresen a casa para nada", señaló a la cadena NBC el jefe del Departamento de Incendios de San Bernardino, Mark Hartwig, quien tras sobrevolar la zona del fuego describió la escena como "devastadora".

Aseguró además que la pequeña comunidad en la que viven parece ahora "un pueblo fantasma".

Contáctanos