La mujer baleada por su esposo, quien también le disparó mortalmente a los tres hijos de ambos y luego se quitó la vida, se habría querellado con las autoridades semanas antes del suceso aduciendo que le tenía miedo a su marido.
Todo esto fue revelado en una conferencia de prensa ofrecida por las agencias de Berks County entre las que figuró el fiscal de distrito John Adams.
Este último destacó que Megan Short, de 33 años, llamó a la Policía de Sinking Spring el pasado 18 de julio, por una disputa con su esposo Mark Short. Esto ocurrió tres semanas antes de la matanza que incluyó hasta el perro familiar.
Al parecer los oficiales le recomendaron que solicitara una orden de protección en la corte, algo que la mujer tenía previsto hacer, pero nunca pudo.
Megan dijo que tenía miedo por su vida, debido a que su esposo Mark, había ido a una tienda de armas en Lancaster County y compró una pistola calibre .38 con varias municiones. Según los investigadores esa fue el arma homicida en la masacre familiar.
El hombre, quien perdió su trabajo como oficial de finanzas antes del asesinato-suicidio, escribió una carta tras balear a su esposa, hijos y perro, para luego darse un tiro mortal. Las autoridades no revelaron el contenido de la nota, pero dijeron que el escrito no mostraba ningún tipo de remordimiento por los asesinatos.
Cada menor murió de un balazo, según Adams, y el gestor de la matanza utilizó seis balas en total.
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Megan publicó en su página de Facebook meses previos al asesinato suicidio que su esposo era abusivo y que ella estaba contemplando la idea de dejarlo y divorciarse.
