Samuel, de 6 años, corre hacia los brazos de su padre.
"Es indescriptible", dice el padre sin poder contener la emoción. "Hace solo siete meses que yo lo dejé evito que ahora está hecho un un hombrón... No pensé nunca después de tantos problemas que lo iba a volver a abrazar".
Para ellos la espera en Costa Rica se hizo aún más larga por Samuel, de 6 años, corre hacia los brazos de su padre.
"Es indescriptible", dice el padre sin poder contener la emoción. "Hace solo siete meses que yo lo dejé evito que ahora está hecho un un hombrón... No pensé nunca después de tantos problemas que lo iba a volver a abrazar".
Para ellos la espera en Costa Rica se hizo aún más larga por la condición cardíaca que sufre el niño, llamada síndrome Wolff-Parkinson-White.
El doctor Félix Roque, alcalde de West New York, intervino para agilizar la salida del niño con su familia varada en Costa Rica.
"En el caso de Samuelito, tiene un problema del corazón que hace sus latidos un poco más rápidos de lo normal, y eso causa que pueda pararse el corazón. Toma medicinas para eso", explica el médico.
Roque es un médico cubanoamericano. Conoció a Samuel durantre una visita a los albergues en Costa Rica. El niño estaba a punto de quedarse sin el medicamento que necesita y Roque se lo envió desde Estados Unidos.
Samuel depende completamente de esas pastillas para mantenerse con vida.
Ahora, en el inicio de una nueva vida en Estados Unidos, reunidos sus padres nuevamente, Samuel sueña con jugar y nadar.
El doctor Félix Roque, alcalde de West New York, intervino para agilizar la salida del niño con su familia varada en Costa Rica.
"En el caso de Samuelito, tiene un problema del corazón que hace sus latidos un poco más rápidos de lo normal, y eso causa que pueda pararse el corazón. Toma medicinas para eso", explica el médico.
Roque es un médico cubanoamericano. Conoció a Samuel durantre una visita a los albergues en Costa Rica. El niño estaba a punto de quedarse sin el medicamento que necesita y Roque se lo envió desde Estados Unidos.
Samuel depende completamente de esas pastillas para mantenerse con vida.
Ahora, en el inicio de una nueva vida en Estados Unidos, reunidos sus padres nuevamente, Samuel sueña con jugar y nadar.
