Los daños son mayores, y es que la destrucción provocada por el huracán Michael no tiene antecedente en el noroeste de la Florida. En Panama City, el acceso por carretera está limitado debido a la gran cantidad de techos y postes que colapsaron e impiden el paso. Incluso un tren fue descarrilado por los fuertes vientos. Las calles parecen lagos, y los niveles de agua iban subiendo como consecuencia de las fuertes lluvias y la marejada ciclónica.
Ha sido el peor día de sus vidas para familias que lo perdieron todo. Sus viviendas no aguantaron los devastadores vientos del ciclón, que a su paso por aquí era considerado categoría 4.
Fue terrible ver como árboles eran derribados de raíz. En realidad fueron momentos de mucho temor y preocupación porque la vida de miles de personas estuvo en peligro.
La policía está en las calles porque hay toque de queda hasta las 8 de la mañana. Mientras tanto, reportes del estado señalan que 388, 160 casas y negocios están sin luz en la región afectada.
El impacto de Michael fue brutal. Y tocó tierra cerca de México Beach, un pueblo costero ubicado a unas 20 millas hacia el este de Panama City. Este monstruoso ciclón no solo deja perdidas sino también huellas sicológicas, sobretodo para quienes vivieron un huracán por primera vez en sus vidas.
