Uno de cada 100 embarazos están en riesgo que el bebé nazca con algún tipo de malformación en el corazón. Afortunadamente hay un procedimiento diagnóstico prenatal que identifica el problema y posibles soluciones.
"Tan simplemente como tener un agujero en el corazón o pueden ser más complicadas, como por ejemplo, en vez de tener cuatro cámaras en el corazón hay solamente dos, y eso requiere una serie de operaciones cuando el bebé nace", dijo el doctor Jaime Elkon, director del Laboratorio de Ecocardiografía Pedriátrica y Congénita.
Los factores de riesgo para enfermedades congénitas son múltiples e incluyen causas ambientales y genéticas.
"Una señora que está en estado con más de 35 años tiene un mayor riesgo de desarrollar ciertos problemas genéticos y con ellos problemas en el corazón”, agregó el médico.
Hay un procedimiento prenatal para detectar si existe o no una anormalidad en el corazón.
El electrocardiograma fetal es un diagnóstico.
"Generalmente entre las 18 y 20 semanas del embarazo hacemos un ultrasonido a través del abdomen de la mamá, mirando específicamente al corazón del bebé dentro del útero. Así podemos detectar cuál es el problema en el corazón del bebé, si es que existe alguno”, dijo Elkon.
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El procedimiento es electivo a mediados del embarazo pero tiene grandes beneficios.
"Les da a los padres una gran cantidad de tiempo para asimilar la información, podemos discutir con ellos en un ambiente tranquilo, sin ningún tipo de presión durante el embarazo, lo que hemos encontrado, cuál es el problema y qué vamos a hacer para ayudar cuando el bebé nazca“, señaló el doctor.
La ecocardiografía fetal le muestra a los doctores el flujo sanguíneo a través del corazón, ritmo cardíaco y las estructuras del corazón del bebé.
