Las puertas de la sede del tradicional restaurante Casa Larios no volverán a abrir. Este miércoles cerca de 80 de sus empleados fueron despedidos, según ellos, sin previo aviso y sin justificación alguna.
Según estas personas, los dueños del popular restaurante los sacaron a la fuerza de su sitio de trabajo. Algunos de ellos llevaban varios años trabajando en el lugar.
Todos los empleados denuncian que les deben 19 días de salario y que nadie les da una explicación sobre su futuro.
Este jueves el restaurante estaba cerrado, los teléfonos seguían sonando y la cafetera ya no produce el café que durante años deleitó a miles de clientes.
La familia Larios, empresarios muy reconocidos del sur de la florida, no han emitido ningún comentario sobre este cierre.
