Problemas de razonamiento, memoria, lenguaje, disminución de movimientos y motivación, y cambios sociales son solo el comienzo de ese asesino silencioso llamado Alzheimer.
El doctor Aldo Berti, director del Miami Neurosurgical Center lo explica así: “Es un asesino silencioso también porque el paciente con Alzheimer va perdiendo rápidamente la capacidad muscoesquelética y cardiopulmonar principalmente, condicionamiento físico y mental y este condicionamiento perdido, pues lleva una serie de enfermedades que son consecuencia de la inactividad, entonces, la inactividad es la madre de todas enfermedades desde una embolia, diabetes incontrolable, hipertensión, obesidad…”
Personas de la tercera edad no son los únicos afectados. El paradigma ha cambiado como la madre de Nancy Salazar. Fue diagnosticada con solo 53 años y falleció a los 67 años.
“El dolor de los hijos de que uno no puede hacer nada... si no quererlos, atenderlos, y en el momento que no te conocen. .. ya hace años y no lo puedo superarlo”, dice Salazar.
Personas que tienen un familiar con Alzheimer tienen entre dos y tres veces más probabilidades de desarrollar la enfermedad, como en el caso de la familia del empresario Jose Aguirrechu.
“En mi familia no fue el primer caso inclusivo mi abuelo, el papá de mi mamá, que murió de Alzheimer relativamente joven; la mama de ella también tuvo la enfermedad, la mamá de mi mamá, mi bisabuela también… es una disposición familiar”.
Los hispanos son el grupo étnico con mayor crecimiento en Estados Unidos. Y existe un tasa mayor de hispanos que blancos no hispanos que padecen de Alzheimer. La causa en parte proviene de hábitos culturales dañinos.
Además, el problema no es solo genético. Existe también el problema vascular, pues regularmente los hispanos no son tan activos físicamente.
Otro factor alarmante: dos tercios de pacientes con Alzheimer son mujeres.
“La mujer está protegida durante la etapa que puede procrear. Una vez que pierde la protección de las hormonas entonces esta tan expuesta como al hombre”, afirma el doctor Berti.
Una nueva opción: un laboratorio en Miami dice tener un examen de detección que puede determinar si la persona podría desarrollar la enfermedad.
“El paciente pues va al laboratorio y se le toma la muestra de sangre. Esta muestra de sangre tiene que ser centrifugada de tal manera que se separa el componente celular del componente plasmático de la sangre. Y en el suero es donde se debe de congelar cuando se transporta y entonces tenemos el laboratorio donde se hace el análisis directamente del cobre en el mismo dia”, indicó Valeria Grace Ricordi, directora de comunicaciones de Igea Research.
Para los pacientes que tienen niveles elevados de cobre, si sigue un régimen recomendado por su médico, puede cambiar el resultado.
Primero, hay que tomar los suplementos de zinc de manera terapéutica.
Hay alimentos que vienen cargados de cobre y hay que eliminarlos. Cambiarlos por una dieta apropiada tipo mediterránea e incrementar la actividad física.
En el 2016, más de 5.4 millones de personas fueron reportadas con Alzheimer.
Pruebas de detección como el ALZ-1 son importantes para informarse y proteger su porvenir y el porvenir de su familia.
