El Departamento de Justicia ha llegado a la conclusión, luego de dos años de profundas investigaciiones, que el Departamento de Policía de Miami ha hecho uso excesivo de la fuerza en varios tiroteos que resultaron en la muerte de varios afroamericanos en el año 2010.
Al mismo tiempo concluyeron que existieron prácticas olicíacas deficientes, actos inapropiados llevados a cabo por sus fuerzas especiales y demoras injustificadas de las investigaciones de 33 incidentes con uso de fuerza policíaca.
Las autoridades obligarán a la Ciudad a establecer un acuerdo judicial para implementar reformas en el Departamento de Policía de Miami que prevengan hechos similares.
