La Organización Mundial de Boxeo (OMB) completó la revisión de la controvertida pelea entre Manny Pacquiao y Timothy Bradley Jr. y los cinco jueces internacionales que la vieron dieron como ganador al ex campeón filipino. Aunque la decisión de la OMB no cambia el veredicto oficial de la pelea disputada el pasado 9 de junio en Las Vegas (Nevada), que fue favorable a Bradley Jr. por decisión dividida, el organismo mundial que supervisó la misma exige que haya una revancha entre ambos púgiles. Pacquiao nada más concluir la pelea y conocer el veredicto favorable a Bradley Jr. dijo que no tenía ningún problema en enfrentarse de nuevo y recuperar el título que le habían quitado de forma injusta. La victoria de Bradley Jr. generó una gran controversia por el veredicto que dieron los jueces Duane Ford y C.J. Ross que encontraron al púgil estadounidense como ganador con puntuaciones de 115-113, mientras que Jerry Roth favoreció a Pacquiao (115-113). El propio promotor del combate, el veterano Bob Arum, de Top Rank, que lleva los intereses de ambos púgiles, calificó la decisión "como una vergüenza para el deporte del boxeo". Arum también ha pedido al fiscal general del estado de Nevada que investigue todo lo relacionado con la pelea por si podían encontrar elementos que demuestren que hubo algo fuera de la ley. Mientras, el presidente de la OMB, el puertorriqueño Francisco "Paco" Valcárcel, que estableció que la pelea sería revisada por cinco jueces internacionales de máxima confianza y experiencia, dijo que todos ellos dieron ganador a Pacquiao con puntuaciones de 118-110, 117-111, 117-111, 116-112 y 115-113, respectivamente. Sin embargo, la OMB, como también había establecido, no dio a conocer los nombres de los cinco jueces que revisaron la pelea.
Arum reconoció que la acción realizada por la OMB había sido la "correcta" y "responsable", pero no quiso hablar de revancha por considerar que ahora no era el momento para hacerlo.
