El grupo de las siete naciones más industrializadas del mundo dijo en su declaración final el sábado que Estados Unidos “no está en posición de sumarse al consenso” sobre el cambio climático.
La canciller Angela Merkel calificó de “insatisfactorias” las conversaciones sobre cambio climático en las que seis países acordaron ratificar el Acuerdo de París, en tanto el presidente estadounidense Donald Trump tuiteó que decidirá la semana próxima.
Trump afirmó que tomará su "decisión final" sobre si su país debe seguir formando parte del Acuerdo Climático de París "la próxima semana".
Trump, reunido con sus socios del G7 en la cumbre que celebra el grupo en Taormina, Sicilia, Italia, hizo ese anuncio a través de su cuenta de Twitter.
"¡Tomaré mi decisión final sobre el Acuerdo de París la próxima semana!", tuiteó Trump, sin dar más detalles.
Durante su campaña electoral, Trump criticó duramente el Acuerdo de París y el cambio climático, un fenómeno que llegó a calificar de "invento" de los chinos, y ya como presidente decidió iniciar un proceso para revisar si a EEUU le conviene seguir formando parte del pacto.
Merkel, por su parte, dijo que las democracias desarrolladas del G7 - Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón, Estados Unidos y Canadá- mantuvieron una discusión “razonable” sobre comercio en la que acordaron rechazar el proteccionismo.
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El acuerdo mantuvo una disposición de reuniones anteriores, frente la posición de Trump, quien sostiene que el comercio debe ser “equilibrado y justo” además de libre.
La firma de esta declaración representa una mano tendida hacia el Reino Unido, "un mensaje de amistad, vecindad y colaboración", tras el atentado del pasado lunes perpetrado en Manchester, que acabó con la vida de 22 personas, entre ellas muchos jóvenes.
May agradeció el compromiso de sus socios: "Gracias por el apoyo demostrado hacia Reino Unido ante este terrible ataque. Creo que es importante demostrar la determinación de todos los países para combatir el terror y proteger a nuestros ciudadanos", dijo.
En quince puntos y tres páginas, el G7 realizó un llamamiento a proveedores y servidores de internet, pero también a las redes sociales, para "incrementar sus esfuerzos en la localización de contenido de índole terrorista" que circula por la red de redes.
También animaron a la industria a "desarrollar de manera urgente y compartir nueva tecnología y herramientas para mejorar la detección automática de contenido que incite a la violencia".
