Testigo español sigue retenido

LA HABANA - El español Ángel Carromero, conductor del vehículo accidentado en el que murió el disidente cubano Oswaldo Payá, continuaba hoy en la ciudad oriental de Bayamo tras haber pasado la noche en dependencias policiales. Fuentes diplomáticas españolas dijeron a Efe que hasta el momento no se han presentado cargos contra Carromero y que los esfuerzos consulares se centran en intentar trasladarle a La Habana en cuanto finalice la fase testifical sobre el accidente, acaecido el domingo pasado. En Bayamo, a 750 kilómetros de La Habana, se encuentran un cónsul adjunto de España, así como otro miembro de la embajada y la cónsul honoraria de la zona para ofrecer asistencia a Carromero, quien dijo haber recibido buen trato, de acuerdo a las citadas fuentes. Estos funcionarios pudieron ver y hablar con Carromero, a quien se le ha permitido también realizar llamadas telefónicas a España. Carromero, vicesecretario de Nuevas Generaciones del Partido Popular de Madrid, conducía el automóvil de alquiler accidentado, en el que, además de Payá, viajaban el cubano Harold Cepero, que también resultó muerto, y el sueco Jens Aron Modig. El español y el sueco sufrieron heridas leves y recibieron el alta hospitalaria el pasado lunes. Según la versión oficial cubana, el accidente ocurrió cuando el conductor de un auto turístico de alquiler perdió el control e impactó contra un árbol. La opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) sostuvo hoy en un comunicado que solo se conocerá la verdad sobre el accidente cuando Carromero y Modig "puedan ofrecer en sus propios países un testimonio objetivo e irrefutable en relación a esta tragedia". "Mientras ambos testigos de excepción permanezcan en Cuba, sus declaraciones estarían sujetas a los inevitables y conocidos condicionamientos que suele imponer el régimen totalitario", agregó el grupo de disidentes que lidera el activista Elizardo Sánchez. La CCDHRN señala que "aún cuando resulte claro" que la muerte de ambos disidentes fue el resultado de un accidente "no puede excluirse de responsabilidad al gobierno de Cuba" por la "mala administración" y "pésimo estado" de las carreteras del país.

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