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El exiliado cubano Ramón Saúl Sánchez sigue en la batalla por obtener un estatus legal en Estados Unidos tras 49 años de permanencia en territorio norteamericano.
La entrevista en las oficinas del Departamento de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) duró unas tres horas. Sánchez dijo que le hicieron todo tipo de preguntas y manifestó sentirse confiado de que pronto será residente legal a pesar de los momentos difíciles que viven los inmigrantes en el país.
Llegó a Estados Unidos a los 13 años y hoy, 50 años después, lucha por obtener residencia permanente."Habٟía mantenido mi esencia de refugiado político, porque reclamo el derecho de los cubanos a regresar a su país, que es el mío también, pero que el régimen de Cuba no me lo da", dijo Sánchez, líder del Movimiento Democracia.
El activista permaneció en Estados Unidos bajo un parole y con permiso de trabajo. Aquí se convirtió en uno de los promotores más visibles por la democratización de Cuba, realizó decenas de huelgas de hambre y encabezó varias flotillas que se acercaron a las costas cubanas. Algunas de sus protestas terminaron en arresto, mientras el gobierno castrista lo calificaba como un terrorista.
Hace 14 años decidió solicitar la residencia. El año pasado se la negaron y en un momento también le quitaron el permiso de su trabajo.
El abogado Willy Allen, que representa a Sánchez, dice estar confiado a pesar del ambiente tan hostil que viven los inmigrantes.
"El mundo entero ha cambiado con el nuevo presidente, pero el caso de Ramón Saúl no me preocupa; al igual que el resto de los cubanos que están en Estados Unidos no me preocupa el cambio de presidente y mi cliente no va a ser deportado", dijo Allen.
La agencia de Inmigración se dispone ahora a verificar la información que se discutió durante la entrevista y se desconoce el tiempo que demorará darle una repuesta.
