Terminó la dura batalla entre Rick Scott y Charlie Crist por quedarse con la silla de gobernador de la Florida. Y tras una apretada carrera Scott logró el favor de los votantes para conservar su puesto.
El triunfo de Scott llega tras una campaña electoral brutal y costosa que ya es histórica, y que se ha decidido por un margen inferior a los 100,000 votos.
Con el 99 % de los precintos escrutados la tendencia es irreversible y Scott vence con el 48 % de los votos contra el 47 % de Charlie Crist.
Recuento
El titular, el gobernador republicano Rick Scott y el republicano convertido en demócrata Charlie Crist se habían neutralizado en una apretada carrera por semanas.
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Crist presentó una moción de emergencia la noche de este martes pidiendo que las urnas en el Condado de Broward, un bastión del Partido Demócrata, se extienda hasta las 9 p.m., debido a "varios fallos individuales y sistémicos que hicieron que sea difícil para los votantes emitir boletas regulares", pero se la rechazaron
Scott ganó, algo notable, ya que sus índices de aprobación nunca fueron más del 50 por ciento.
La carrera entre Scott y Crist fue intensa y llena de ataques personales.
Durante la noche final de su campaña Scott predijo audazmente que "vamos a patear trasero de Charlie".
