Este jueves tomó por sorpresa la detención de Sam Hurd, jugador de los Chicago Bears, quien es acusado de intentar adquirir una alta cantidad de cocaína con la intención de distribuirla en el área de Chicago. La noticia cayó como bomba en el mundo deportivo. Sam Hurd, el receptor de los Chicago Bears fue detenido anoche en Chicago y ahora enfrenta cargos federales por drogas. Según investigadores, el jugador estaba negociando con un agente encubierto, para supuestamente distribuir narcóticos en la zona metropolitana de Chicago. Sin embargo, Hurd apareció por primera vez en el radar federal, desde el pasado 27 de julio en Dallas, dos días antes de que firmara su contrato con los Osos. En ese entonces, un informante de la policía reportó que un socio de Hurd, conocido como "TL" intentaba comprar 4 kilos de cocaína para el deportista. Ese sujeto fue arrestado dos días después en el auto de Hurd. Ahí mismo las autoridades encontraron $88,000 dólares en efectivo. En septiembre, dos días antes del partido de los Bears contra los Falcons, Hurd presuntamente estaba negociando con un distribuidor de Dallas para comprar 5 kilos de cocaína por $50,000 dólares. La semana pasada, agentes recibieron informes de que el jugador pretendía distribuir de 100 a 200,000 dólares de droga por semana. El miércoles de esta semana, cuando Hurd pensaba que hablaba con un distribuidor de drogas, fue detenido en un restaurante cerca de la avenida Bryn Mawr, después de que tomara posesión de un kilo de marihuana. Al parecer, hay indicaciones de que otros jugadores profesionales pudieran estar involucrados.
