Por semanas, Saúl “el Canelo” Álvarez se ha dicho listo para su pelea de este sábado 14 de septiembre ante Floyd Mayweather, en el estelar MGM Grand de Las Vegas. Dice que ganará, pero en el guión clásico del boxeo; el récord de ventas al que aspira la velada no se alcanza si “Canelo” no se anuncia a sí mismo como a un elegido.
Mayweather sabe de este tema. “Money” se promociona, se alaba, se eleva altares desde los micrófonos. Es el último gran Narciso del ring. “Nunca voy a perder”, dice. “Cuarenta y cuatro (victorias), cero empates, cerro derrotas.”
La diferencia, hoy, es que Mayweather, de 36 años, tiene base sobre números. “El Canelo”, en esperanzas.
A sus 23 años, “el Canelo” no carga en la mochila victorias estelares, mas brilla por un potente carisma, y justo por ello despierta sospechas naturales. ¿Qué tan bueno sería en un combate tan pesado? ¿Dónde acaba el maquillaje mediático?
Un “Backstreet boy”, un “miembro de ‘Menudo’”, llamó Chris Mannix, columnista de Sports Illustrated, a Álvarez. “Es una de las grandes estrellas del boxeo. ¿Pero es uno de los mejores?”.
Ni en el mismo equipo del “Canelo” escapan de esta burbuja. En una de sus prácticas previas, en la aislada ciudad de Big Bear, Eddie Reynoso, uno de los entrenadores de Álvarez, dijo a su púgil: “Traes piernas, traes cintura, traes bloqueo, traes pegada, traes rapidez…”. Y de inmediato remató Chepo Reynoso, su otro coach: “Y además no eres feo”.
¿Dónde está la frontera entre la propaganda y la realidad boxística del “Canelo”?
En la otra esquina, Mayweather, el mejor boxeador del planeta hasta que se pruebe lo contrario, lucha contra el tiempo. ¿Le queda combustible para seguir en la cima o le caerá este fin de semana su primera multa por decadencia física?
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Óscar de la Hoya, mentor del “Canelo”, quien perdió ante Mayweather en 2007, subrayó: “En el boxeo, nadie se mantiene invicto. (Mayweather) ya no tiene 25 años. Ni tampoco 30”.
Ahí apunta el show. Mayweather es un experto que busca retrasar ese día en que lo llamen veterano. En sus últimas peleas ha sido más inteligente que potente; en sus nueve presentaciones desde 2006 suma sólo dos nocauts.
Un viejo zorro es Mayweather. Y sabe más por viejo, por eso es favorito para vencer al “Canelo”. Y mientras llega la campana, el equipo del mexicano sueña con romper los pronósticos y acabar, más que con un invicto histórico, con una dictadura legendaria de los pesos medianos. Sobre eso, De la Hoya confesó hace unos días: “Cuando (Mayweather) pierda, diré: ‘Por fin’.”
